La ciudad de Campeche
Cuando se planea una visita a la Riviera Maya es común considerar múltiples destinos, ¿cómo decidir? Esta área se caracteriza por estar llena de vegetación, sabrosos platillos y riqueza arqueológica digna de contemplar y recordar.
Entre todas las posibilidades, Campeche destaca por múltiples razones, a continuación las presentamos.
Por qué visitar Campeche
Campeche es una joya del sureste mexicano donde encontramos un auténtico viaje en el tiempo, entre el virreinato y la modernidad. Entre ciudad y ciudad, construcciones que mezclan estilos o incluso a calles de diferencia, parte de su riqueza turística se desprende de sus construcciones, las cuales hablan de una historia que transcurrió hace muchos años y que estos edificios no piensan olvidar.
Además de este interesante motivo, lo cierto es que Campeche es amplio en su diversidad turística y es fácil encontrar algo de nuestro agrado, sin importar el tipo de viaje que se esté buscando.
Por ejemplo, cuenta con atractivos originales como un recorrido en barco pirata o, si se desea, puede recorrerse de forma individual su bello malecón desde donde se contemplan sus aguas. Aprovechando esta costa, a lo largo del estado hay manglares, bosques, playas y numerosos campamentos que trabajan con una amplia variedad de tortugas marinas, como ChenKán.
Tiene zonas arqueológicas como Kalakmul, Uxmal, Chicanná, Hormiguero, Edzna, Becán y otros que aún no han sido abiertos al público y se cree que hay más inmersos en la selva. Parte del encanto de estos asentamientos es que aún se encuentran, en gran parte, rodeados de su vegetación original, teniendo muy de cerca los árboles con sus pájaros y sus trinos como acompañantes de nuestra travesía.
Para descansar y disfrutar del sol, las playas de Campeche son imprescindibles. Algunas de las más representativas son Tortugueros, Punta Xen, Bahamitas, Playa Norte y otras más que vale la pena visitar, como Xicalango.
Si es más deseable pasear y sumergirse en la época histórica del estado, lugares como San Francisco de Campeche dejarán satisfecho a todo visitante, pues, esta ciudad, con restos de su antigua muralla usada como fortaleza, ofrece grandes historias que conocer.
Las mezclas de lo moderno y lo antiguo son dignas de verse y dentro de Campeche se encuentran en Bécal. Aquí se puede observar una sincronicidad entre las chozas mayas tradicionales y la arquitectura neoclásica; así mismo, pueden visitarse grandes haciendas donde se producía maíz, caña de azúcar y henequén, algunas de las cuales ya han pasado por una minuciosa reconstrucción que les permite usarse como sitios turísticos, algunas de ellas son San José Carpizo, Chunkanán o Uayamón.
Qué comer en Campeche
Después de trazar una ruta llena de grandes experiencias, debemos considerar lo que probaremos en tan particulares destinos. Aquí, ciertos platillos característicos de Campeche.
Los mariscos de Champotón son muy sabrosos, si visitamos este poblado debemos buscar un buen local en su malecón o en casas de gran belleza arquitectónica para probar delicias como manitas de cangrejo, caramelos al coco o pan de cazón (hecho con tortillas).
El pan de Pomuch. Si el recorrido nos acerca a esta pequeña ciudad, no se puede desperdiciar la oportunidad de probar su delicioso pan, el cual tiene fama de ser el mejor de la península y uno de los mejores de México.
Como no podía faltar en la península de Yucatán y sus alrededores, la cochinita pibil que se prepara en Campeche respeta la tradicional forma de prepararlo cocinándose bajo tierra, con un sabor exquisito que satisface cualquier paladar.
El chocolomo. Si los mariscos no son la opción favorita, este caldo está hecho con lomo de res y vísceras, acompañado de un toque de hierbabuena y un poco de cilantro. Estas delicias se pueden encontrar en restaurantes de renombre como El marganzo, Los portales de San Francisco o una opción totalmente local: el Mercado Pedro Sainz de Baranda.
Campeche es un estado rico en opciones, ¿cuál lugar es el favorito para un próximo destino?